Viaje Infinito

Berlín: Vanguardia en la Vibrante Capital Alemana

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En un nuevo capítulo de Viaje Infinito, nos trasladamos a la ciudad que nunca duerme, a Berlín. Una ciudad histórica que no olvida su pasado pero al mismo tiempo es una moderna capital.

Conversamos con Nicole Geisse, periodista que vive hace 5 años en Berlin y compartió los mejores datos de la ciudad.

Conversamos también, con Manuel Maira, Periodista de espectáculos y deporte, quién vivió en la capital alemana y nos contó acerca de sus mejores recuerdos en la ciudad.

Atracciones en Berlín

1. Puerta de Brandeburgo

La Puerta de Brandeburgo (en alemán, Brandenburger Tor), es una de las atracciones en Berlín más conocidas de Alemania. Fue inaugurada en 1791, obra del arquitecto Carl Gotthard Langhans y servía como puerta de entrada a la ciudad. Es también uno de los monumentos históricos del siglo XX y, hasta 1918 solamente miembros de la familia real tenían permiso de usar el paso central de la puerta.

¡No hay mucha cosa para hacer en la Puerta de Brandeburgo, pero es un buen lugar para tomar fotos! Como está ubicado en el centro de la ciudad, puedes aprovechar y visitar otros puntos turísticos cercanos, como la Potsdamer Platz, Catedral de Berlín y el Berliner Fernsehturm.

2. Catedral de Berlín

Es la mayor iglesia protestante de Alemania y uno de los puntos turísticos más bonitos de la capital. Fue construida entre 1895 y 1905 con estilo arquitectónico neoclásico, a la base del río Spree, en la Isla de los Museos.

No puedes dejar de entrar y deslumbrar la belleza de la decoración, con muchas obras y dibujos que muestran la historia del protestantismo y figuras importantes de la religión. En su interior también se encuentra el mayor órgano del país y la cripta de la familia Hohenzollern, con más de 90 tumbas y sarcófagos, incluyendo la del rey Friedrich I y de la reina Sofía Carlota.

Si estás dispuesto a subir 270 escalones, puedes visitar la cúpula y contemplar la hermosa vista del centro de la ciudad. Su portada está al frente del jardín Lustgarten un espacio rodeado por árboles que los berlineses tienen para relajarse y aprovechar los días con sol.

3. Muro de Berlín

El Muro de Berlín tal vez sea una de las atracciones en Berlín más conocidas de Alemania y del mundo porque fue responsable por la separación de Berlín en dos partes por 28 años y separó muchos amigos y familias del día para la noche.

Berlín paso por varios acontecimientos desde la finalización de la II Guerra Mundial en 1945 donde fue dividida en 4 zonas, en el avance de la guerra fría se disputo la separación de la capital en dos sectores, a mediados de 1962 comenzó la construcción del muro de 4 metros de altura y el 12 de agosto de 1989 el gobierno de la República Democrática Alemana libero el paso haciendo que el muro perdiera su significado.

Aún sobraron restos del muro como elemento simbólico de todo ese periodo tan emblemático para el país y el mundo. La parte más conocida e importante está ubicada en lo que se llama East Side Gallery, el mayor tramo conservado, con 1,3 kilómetros de extensión y el muro está decorado con los más increíbles dibujos y manifestaciones artísticas.

4. Monumento al holocausto

Así como el Muro de Berlín, el Monumento al Holocausto es una de las  atracciones en Berlín más ricas en historia. Fue construido en la memoria de los judíos muertos en el Holocausto durante la Segunda Guerra Mundial. El monumento es formado por 2.711 bloques de hormigón de diferentes alturas y permite que los visitantes elijan el camino de entrada y salida.

En el subterráneo se encuentra un centro de informaciones donde podrás aprender más sobre la historia del holocausto, persecución y el exterminio de los judíos y en la siguiente parte de la exposición puedes leer testimonios de sobrevivientes.

En otra sala son expuestos nombres, edades de las víctimas y el año de sus muertes. Es, tal vez, uno de los lugares más impactantes del monumento porque, se demorará 6 años para terminar de leer todos los nombres. La entrada es gratuita para todos.

5. Torre de televisión de Berlín

El edificio más alto de Alemania, con 368 metros de altura, es una óptima opción para quien quiere tener una vista panorámica de Berlín. Fue erigida en 1969 como un semblante del poder soviético sobre el estadounidense.

Dentro del edificio, en la plataforma hay un restaurante giratorio, donde puedes aprovechar la vista de la ciudad con lo mejor de la culinaria alemana.