Entrevista Infinita

Analista internacional Guido Larson y elecciones del Parlamento Europeo: “Los ciudadanos están votando en términos de orden doméstico e ideológico”

Imagen principal
Tras tres días de votación, los ciudadanos de los 27 países que integran la Unión Europea escogieron a sus representantes en el parlamento. En conversación con ‘Ahora es Cuando’, el académico de la Escuela de Gobierno de la UDD, Guido Larson, analizó los resultados de estas elecciones.
En primer lugar, el académico Guido Larson explicó que “en cada uno de los países se votan por los partidos locales que luego quedan alojados en las divisiones ideológicas (…) eso se traduce en un asiento en el Parlamento Europeo asociado a estos bloques de carácter ideológico supranacional”.
En la misma línea, afirmó que en este tipo de elección “las campañas están centradas en cuestiones de orden doméstica”, pero que este tipo de problemas “son trascendentes a casi todos los países de la Unión Europea” como lo es migración, desempleo o combate a la inflación. Así concluyó que“los ciudadanos de Europa no están votando realmente en términos de bloque regional” sino que “en términos de orden doméstico e ideológico”.
De esta manera, señaló que “son elecciones que no cuentan con el grado de fervor (…) no son elecciones que tiene la cantidad de presupuesto de otro tipo de elecciones”, no obstante, “los resultados fueron tan significativos que finalmente estamos hablando de eso hoy”. 
Larson también explicó que “hay una suerte de miopía de la propia izquierda europea, que ha tendido a adherir a temáticas de orden cultural y posmoderno, pero que desde el punto de vista práctico hace perder parte de un segmento de la población que le interesa estabilidad, seguridad e incremento en los salarios”. 
En este sentido, argumentó que “se produce un vacío que no es llenado por el centro, entonces la población tiende a irse al extremo”.  En comparación con lo que ocurre en Chile, el analista internacional afirmó que también en el caso europeo “ha habido en la discusión una suerte de ‘ridiculización’ respecto de aquellos sectores que están inclinándose a la derecha o extrema derecha”. De esta manera, concluyó que esto  “genera un elemento de rabia y una postura defensiva muy importante, porque al ridiculizarlos se alienan y se vuelcan a aquellos partidos” de extremos.