Tres conclusiones que dejan los premios SAG de cara al Oscar

Por Matías de la Maza.

1) Hay dos categoría de los Oscar que quedaron más que definidas

La entrega de los Oscar está a casi un mes de distancia, y muchas cosas pueden pasar en ese período, pero salvo un cataclismo o una gran sorpresa, tras la entrega de los premios SAG (Screen Actor’s Guild) anoche, del Sindicato de Actores de Hollywood y que suele anticiparse a los ganadores del premio de la Academia, hay dos categorías que ya están un 99,9% cerradas: Mahershala Ali se llevará el Oscar a Mejor Actor de Reparto por Green Book, mientras que Glenn Close será la ganadora del Oscar a Mejor Actriz por La Esposa.

Ambos han ganado prácticamente todos los premios en esa categoría esta temporada, y el SAG viene a confirmar cómo probablemente votará la Academia, donde buena parte de los que eligen a los ganadores en las categorías de actuación también votan para el premio de anoche. Para Ali, será su segundo Oscar a Mejor Actor de Reparto en dos años, tras haber ganado en 2017 por Luz de Luna, mientras que Glenn Close, a sus 71 años, se llevará su primer Oscar (!!!), tras seis nominaciones previas.

Lo sorprendente es cómo la candidatura de Lady Gaga a Mejor Actriz por Nace Una Estrella se fue desinflando en enero. Partió el mes como favorita, pero sólo se llevó el Critic’s Choice en esa categoría, donde además empató con Close, por lo que sus probabilidades de triunfo son ese 0,1% que sobra.

2) Rami Malek y Regina King parecieran tener asegurado su Oscar, pero…

La lógica indica que Rami Malek debería ganar el Oscar a Mejor Actor por su interpretación de Freddie Mercury en Bohemian Rhapsody, tras haber ganado el Globo de Oro y el SAG. Y sí, es el favorito, pero no hay que descartar el factor Christian Bale por El Vicepresidente, donde interpreta a la mano derecha de George W. Bush en su gobierno, Dick Cheney. Para el papel, Bale realizó una transformación sorprendente, subiendo considerablemente de peso y apareciendo calvo. Y si algo aman los Oscar, son las transformaciones, más aún si implican a una figura política del peso de Cheney. Bale ganó el Globo de Oro a Mejor Actor de Comedia y el Critic’s Choice a Mejor Actor, premios con menos peso que el SAG, pero El Vicepresidente ha tenido una fuerte campaña de promoción para los Oscar, y podría dar vuelta el escenario en un mes.

El caso de Regina King es más curioso: ha ganado prácticamente todos los premios como Mejor Actriz de Reparto por If Beale Street Could Talk, pero para los SAG no estaba ni nominada (discrepancias naturales que se pueden dar entre los SAG y los Oscar, ya que si bien comparten muchos votantes, el Sindicato de Actores es más amplio). En cambio anoche triunfó sorpresivamente en esa categoría Emily Blunt, por Un Lugar en Silencio, mientras que no está nominada para el Oscar. Al no ser una rival el 24 de febrero, el triunfo de Blunt no pareciera disminuir las posibilidades de King, pero el hecho que no haya sido ni considerada para el SAG podría anticipar que los votantes tienen otras favoritas en esa categoría.

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